
Predicciones futuristas de 1900: ¿cómo se imaginaban el año 2000?
A los humanos siempre nos ha gustado imaginar cómo será el futuro y qué milagros tecnológicos habremos inventado por el camino. La prueba de que llevamos siglos haciéndolo viene de la mano de John Elfreth Watkins, un ingeniero civil estadounidense que imaginó en el año 1900 cómo sería nuestra sociedad a principios del siglo XXI, en el año 2000.
Ladies’ Home Journal
El artículo apareció por primera vez en la página 8 de la revista femenina Ladies’ Home Journal y se titulaba What May Happen in the Next Hundred Years, es decir, «Qué podría pasar en los próximos cien años».
Desde el principio del artículo, ya advertía de que estas «profecías» resultarían extrañas, casi imposibles. No obstante, aseguraba haber consultado las más importantes instituciones científicas y educativas para conocer sus opiniones y formular una imagen futurista lo más formada posible.
Por lo tanto, a diferencia de otras predicciones, estas fueron consultadas por expertos en la materia o gente formada en los campos que se exploran a continuación. Y, como veremos, no son tan «imposibles» como él imaginaba, sino que son una realidad cotidiana.
Predicciones para el año 2000
Fotografía en color
Watkins predijo la fotografía digital en una época en la que la grabación de vídeo estaba severamente limitada y las fotografías eran realizadas en blanco y negro. Escribía así:
«Las fotografías podrán ser telegrafiadas desde cualquier distancia. Si hay una batalla en China dentro de cien años, instantáneas de los eventos más llamativos serán publicadas en los periódicos una hora más tarde… Las fotografías reproducirán todos los colores de la naturaleza».
Si imaginamos la situación de la época, para cuando una fotografía llegaba a la otra parte del mundo al estallar un conflicto importante, habían pasado días. De esta manera, se puede decir que Watkins llegó a imaginarse conceptos como la televisión en directo e incluso plataformas como Twitter que surgirían poco más de una década después del año 2000, siendo hoy día una de las herramientas donde más rápido viaja la información.
Llamadas internacionales
En relación al punto anterior, Watkins también predijo que la telefonía inalámbrica permitiría a un hombre destinado en medio del Atlántico hablar con su mujer ubicada en Chicago. Creía que en el año 2000 podríamos telefonear a China con tanta facilidad como de Nueva York a Brooklyn.
Aunque la telefonía existía por aquel entonces, las llamadas internacionales aún tardarían varios años en llegar. Parece que el ingeniero consideraba China como un ejemplo recurrente de «la otra punta del mundo» para sus ejemplos.
Como todos sabemos, esta predicción se cumplió, y cada año que pasa se exploran nuevas vías para la comunicación a larga distancia.
Comida rápida
Watkins creía que la comida rápida o la comida preparada sería algo muy común en el futuro, aunque también predijo que los platos y utensilios se devolverían al establecimiento para ser lavados.
Podemos decir que predijo con cierta exactitud la proliferación de establecimientos de comida rápida o comida para llevar. Desgraciadamente, no devolvemos los utensilios, contribuyendo a la creación de basura.
Invernaderos
El ingeniero predijo que los invernaderos podrían hacer crecer cualquier tipo de alimento en lugares donde se crearan las condiciones artificiales para ello. Se aplicarían corrientes eléctricas al suelo para que las plantas crecieran más grandes y de manera más rápida.
Visionó correctamente el uso de electricidad en invernaderos, aunque de manera algo diferente. El objetivo era disponer de alimentos que solo se encontrasen en el hemisferio opuesto.
Actualmente el comercio internacional es tan rápido y eficiente, que los alimentos que provienen del otro hemisferio llegan a las cestas de compra locales en muy poco tiempo.
Naves de guerra
Watkins creía que el transporte aéreo no tendría tanta importancia como otros medios de transporte, pero pensaba que se construirían enormes naves de guerra que podrían atacar objetivos terrestres usando telescopios. Se trataría básicamente de fortalezas aéreas que dispararían armas de energía.
También predijo los tanques, y en esto acertó de lleno. Consideraba que la labor de la caballería sería realizada por estos vehículos motorizados, que hicieron su entrada poco tiempo después en la Primera Guerra Mundial, o la Gran Guerra, como se llamó en la época.
Otro aspecto inquietante fue su descripción de cargas que destruirían ciudades enteras en el caso de estallar un conflicto. ¿Estaríamos ante una aproximada predicción del armamento nuclear?
La desaparición de las letras C, X o Q
La evolución del lenguaje llevaría a la desaparición de las letras C, X o Q, al ser innecesarias. Esta predicción está claramente influenciada por el uso de estas letras en el lenguaje inglés, y resultaría harto complicado en otras lenguas.
Todo el mundo caminará 10 millas al día
Caminar 10 millas al día fue una predicción muy optimista que no acabó por cumplirse. Es más, la ratio de obesidad de las sociedades modernas no ha hecho sino aumentar en las últimas décadas.
Watkins llegó a decir que se considerarían débiles a aquellos que no realizasen el suficiente ejercicio diario. Ya no hay excusa para volver a apuntarse al gimnasio.
Desaparición de moscas, mosquitos y cucarachas
Algo que, como sabemos, no se cumplió. Las plagas de insectos siguen siendo algo muy actual. Desgraciadamente, las abejas si están desapareciendo debido a los cambios acontecidos en nuestro mundo, algo que sí nos debería preocupar porque son una parte vital de nuestros ecosistemas.
Una vida tranquila en la ciudad
Watkins creía que todos los transportes urbanos se ubicarían bajo tierra, o bien a una altura considerable, haciendo que las ciudades fuesen silenciosas y que las personas pudiesen caminar por ellas libremente.
Si bien es cierto que las ciudades más grandes del mundo cuentan con eficientes transportes subterráneos como el metro, el tráfico no ha hecho más que aumentar, llevando a los habitantes a unos niveles de polución y contaminación acústica peligrosos.
Sea cual sea el futuro que nos imaginemos, y la época en que lo hagamos, parece ser que el sueño de los coches voladores nunca pasa de moda. En pleno 2020, siguen sin ser una realidad.
John Elfreth Watkins realizó unas predicciones interesantes. Más que confirmar su exactitud en el año 2000, podemos vislumbrar cómo la tendencia de la evolución de nuestra tecnología y nuestras sociedades no iba por mal camino.
Es interesante observar cómo nuestra imaginación no solo precede a los cambios que realizamos como especie, sino que muchas veces la predispone a ello, como una profecía autocumplida. Solo tenemos que ver el caso de las novelas, series y películas de ciencia ficción. Ciertamente, será mejor que nos imaginemos un futuro optimista a partir de ahora.
El texto anterior expresa mis ideas y opiniones inspiradas en
https://www.youtube.com/watch?v=4gzBhTL4oAs
https://www.bbc.com/news/magazine-16444966