
Limitados por las superbacterias: el precio de la libertad
Igual que como sucede con la pandemia de Coronavirus, las superbacterias tienen un potencial devastador para la humanidad, en 2050 matarán a más personas que el cáncer y otras enfermedades.
La sociedad tiene el poder con su comportamiento de mejorar los niveles de salud y evitar catástrofes sanitarias. En pandemia hay que seguir una serie de protocolos para salvaguardar la salud propia, que también son muy importantes para ayudar a que otros no se enfermen.
¿Son irresponsables las personas que no hacen caso de las recomendaciones de distanciamiento físico y no usan el tapaboca? ¿La muerte de los menos afortunados (los que han presentado síntomas agudos), es el precio de la libertad?
Las superbacterias son microorganismos que han desarrollado resistencia a los antibióticos y por lo tanto se hacen inmunes a ellos, la sociedad debe trabajar como un solo cuerpo, de lo contrario la humanidad pagará un gran precio.
¿Una vuelta en el tiempo?
Infecciones como la neumonía, que acababa con la vida de muchos en el pasado cercano. Desde la creación de la penicilina, los tratamientos contra las bacterias cambiaron para bien; no obstante, el propio creador Alexander Fleming advirtió que los microorganismos podrían hacerse resistentes al antibiótico.
De modo que las bacterias cambian, ya sea porque cuando se dividen se crea un error y este va produciendo con el tiempo una mutación o porque también buscan adaptarse a un nuevo ambiente.
Para algunos expertos la vida comenzó en la tierra hace 4 mil millones de años y desde ese entonces las bacterias han estado aquí, ellas pueden vivir sin luz, sin oxígeno, en los ambientes más hostiles, en el espacio. Ellas hacen lo que menor saben hacer, sobrevivir.
Un antibiótico las mata; sin embargo, pueden aprender a la luchar contra ellos hasta que se hacen inmunes y entonces viene la tragedia, se vuelve al pasado, una neumonía que podía ser tratada sin problema se convierte en mortal porque no hay antibiótico que funcione.
Esto ocurre porque los individuos consumen antibióticos sin haber sido evaluados por un médico y los consumen con tal regularidad, que van haciendo que las bacterias “aprendan a hacerse inmunes a ellos”. Las bacterias inmunes pasan a otros cuerpos y lo único que queda para salvar a la gente es encontrar un nuevo antibiótico.
Mientras más se consuman antibióticos, menos tiempo queda para que las bacterias comiencen a desarrollar inmunidad, es como un conteo regresivo que está agotando sus horas. En una situación de tanta vulnerabilidad para los humanos, quien no tenga defensas para combatir las bacterias, morirá.
El tiempo establecido para el descubrimiento de cada nuevo antibiótico varía entre 10 y 20 años. Además, como los que están en el mercado aún funcionan, la I+D (investigación y desarrollo) no tiene el apoyo financiero suficiente de los laboratorios. Es un problema de dinero, cultura y tiempo ¿Es tan poco interesante invertir para preservar la vida?
A pesar del desarrollo tecnológico actual, el mundo se está quedando sin antibióticos lo suficientemente efectivos para curar las infecciones que antes se podían curar sin problemas. Una de las causas por las que millones de personas en todo el mundo podrían morir al adquirir una bacteria luego de una operación, como sucedía antes de los años 50.
El mantra debe cambiar
“Mientras mi familia y yo estemos bien, no me importa lo que hagan los demás”. Este mantra egoísta debe cambiar por uno más integrador, uno que entienda que funcionamos como un sistema, un gran cuerpo que, si es atacado por un virus o una bacteria, reúna su inteligencia y sus fuerzas para luchar contra ellos, de lo contrario ese cuerpo morirá por la enfermedad.
Nadie quiere que sobreviva solo un pulmón, o solo el cerebro, hace falta el cuerpo completo ¿No le parece?
Un nuevo mantra podría ser: “Mientras más personas estén sanas y bien, mejor nos irá a todos”
Quien está infectado de Covid, puede no saberlo, porque hay quienes no presentan síntomas, esa persona, puede contagiar a 2,5 más en promedio, entonces en un mes un individuo tiene el potencial para provocar 406 contagios.
En días recientes (la semana entre el 5 y 12 de septiembre), las redes sociales mostraban un video en España. Eran alrededor de 5 efectivos policiales que habían abordado a una mujer de unos 40 años que iba por la vía pública y no usaba el tapaboca o barbijo. La dama gritaba que tenía derecho a no usar el tapaboca, que no aceptaba una dictadura y se resistía a la sanción, al parecer, era ir detenida, cuando menos.
Poco a poco y ante el evento que comenzó a tornarse violento por la resistencia de la mujer a entrar en un vehículo de la policía. Los transeúntes comenzaron a gritar “libertad, libertad, libertad”, ellos llevaban su tapaboca ¿Estaban los transeúntes que gritaban “libertad” en desacuerdo con el uso del tapaboca y por eso pedían libertad? ¿Solo pedían que no la apresaran por no llevar el tapaboca, la regla social para no comprometer la salud propia y la de otros? ¿Qué hubiese pasado si la señora hubiese ido desnuda por la vía pública y la policía hubiera intentado arrestarla? ¿No es eso también libertad?
Una mirada al futuro
Estimaciones de OMS, indican que 10 millones de personas morirán por no poder tener antibióticos para tratar a las enfermedades bacterianas que padecen. No importará el nivel de atención médica, si es de un país desarrollado o de uno pobre, si se tiene mucho dinero o poco, no habrá antibiótico para tratar la superbacteria que está por terminar con su vida.
El nivel de resistencia a los antibióticos está aumentando en niveles preocupantes ¿Sucederá lo mismo que con la pandemia, que a pesar de estar advertida poca atención se le prestó hasta que llegó? ¿En verdad estamos aprendiendo la lección con el Covid 19?
Las superbacterias están reduciendo las capacidades de los pueblos para tratar las infecciones.
Neumonía, gonorrea, tuberculosis, eran enfermedades que contaban con tratamiento y ya no eran mortales, ahora el escenario es diferente.
Según datos de la Asociación para el descubrimiento de Nuevos Antibióticos de España, en Europa mueren 26 millones de personas al año por complicaciones dada la imposibilidad de tratar infecciones.
En la última década el uso de antibióticos ha aumentado en un impactante y lamentable 40% y en la industria agrícola-animal, ese porcentaje puede ser mucho mayor, así lo refiere el presidente de la mencionada asociación, el Dr. Domingo Gargallo-Viola.
Como en la pandemia de Covid 19, la colaboración de todos es fundamental, las sociedades deben establecer reglas que les permitan sobrevivir ¿No es lo más civilizado?
La pandemia nos ha demostrado lo frágiles que somos como especie y lo tanto que necesitamos de los otros para sobrevivir. Con los antibióticos pasa lo mismo, mientras menos antibióticos se consuman, más tiempo tenemos para que combatan a las bacterias ¿Pueden las personas por sí solas lograrlo o habrá que establecer restricciones sanitarias para alargar el tiempo de vida de los antibióticos que se tienen hoy?
En este escrito expreso mis ideas y opiniones sobre las superbacterias y la tragedia anunciada que significa la incapacidad de luchar contra ellas con los antibióticos actuales. –
Fuentes consultadas: BBC News, EFE y OMS.