
4 letras pueden marcar su destino
¿Quién soy yo? Es una de las grandes preguntas que un hombre puede hacerse. Trate de responder esa pregunta y sentirá lo abrumadora que puede ser. Y es que conocerse a sí mismo es una de las cosas más difíciles de hacer y que más ha fascinado a la humanidad y a sus más grandes pensadores.
Hay 4 letras que pueden marcar su destino, su futuro trabajo puede depender, no de sus aptitudes o destrezas, sino de su personalidad. Las cuatro letras corresponden al acrónimo MBTI, Myers-Briggs Type Indicator, es el indicador más usado en el mundo y señala cuál es el tipo de personalidad que Ud. tiene.
Si una persona conoce su personalidad podría relacionarse con otras que tengan una personalidad similar y así les iría mejor. Lo mismo podría analizar un empresario o un gobierno, o una universidad, o alguien que busque pareja ¿No le parece? Pero, ¿Qué consecuencias podría tener un instrumento que mida su personalidad?
¿Es el MBTI un instrumento que estimula la discriminación? ¿Puede una universidad o un empleador rechazar una postulación de alguien por la personalidad que tiene? ¿Dónde quedan las aptitudes? Si alguien es muy bueno en matemáticas ¿Cuánto puede importar si es introvertido, extrovertido o controlador? Algunas personas piensan que estos tests de personalidad son discriminatorios.
El instrumento de medición en cuestión, fue creado con la finalidad de ayudar a las personas a conocerse a sí mismas, dio un giro al ser usado por gobiernos y empresas para escoger el personal que contrataban. Su impacto ha sido tal, que la llegada de internet lo terminó de impulsar a un nuevo nivel, ahora es usado en las páginas de citas para que las personas que buscan pareja consigan a la persona perfecta, a su media naranja.
Las páginas de citas hacen que cada candidato llene un test de personalidad y en función del resultado lo coloca en una comunidad o lo define para que quien busca pareja tenga más información sobre el prospecto. El amor y las métricas, una nueva manera de emparejarse ¿Qué tan efectivo puede ser? ¿Son mejores las relaciones de pareja porque sus personalidades son compatibles?
Conocerse a sí mismo puede traer consigo una enorme cantidad de ventajas entre las que se pueden destacar: tomar mejores decisiones sobre las carreras que debemos estudiar, buscar los trabajos que nos harán sentir mejor, el tipo de personas con las que puede uno relacionarse mejor, conocer cuáles son las debilidades para prepararnos y superarlas, aprovechar nuestras fortalezas para obtener mejores beneficios, entre otras ¿Le parece eso bueno?
Al igual que el dinero, el conocimiento y la inteligencia, los instrumentos de medición de la personalidad no son cosas buenas ni malas, todo depende del uso que se les dé ¿No le parece?
El conocido canal de televisión HBO Max, ha puesto de nuevo en el tapete el tema de los test de personalidad con el documental Persona: el lado oscuro de las pruebas de personalidad. En él se muestra lo que poco se habla sobre el tema, básicamente lo discriminatorios que pueden ser.
El audiovisual deja saber que las personas con alguna enfermedad mental, o simplemente por tener costumbres diferentes porque provienen de culturas no blancas, están en desventaja al presentar esas pruebas psicométricas, que según la opinión de algunos, no gozan de rigor científico, como el MBTI, aunque los directores de la compañía aseguran lo contrario.
Pero, ¿No es ideal saber en qué ambiente una persona se desempeñaría mejor según su personalidad? Es el argumento de los reclutadores de talento humano al aplicar el instrumento, que dice la compañía Myers-Briggs no es un test, sino un indicador ¿Y para qué son los indicadores, no son para servir de base para tomar decisiones?
¿Es más bien el enfoque del documental del canal televisivo un tanto alarmista o exagerado? Si una persona busca una pareja en una plataforma de citas y consigue por ejemplo a alguien que le agrada y tiene una clasificación ISTJ que significa que es introvertido, sensorial, pensamiento, calificador y decide que no es un tipo de personalidad que le interese ¿Qué hay de negativo en eso?
Una situación similar puede presentarse en una postulación a una universidad o en una aplicación para un trabajo, solo que en estos casos, el futuro de una persona puede verse truncado y el derecho a la educación o al trabajo podrían verse vulnerados. Si se tienen las aptitudes necesarias; pero el tipo de personalidad es un indicador decisivo y no referencial, entonces eso puede representar un problema.
El instrumento de la compañía Myers-Briggs es aplicado anualmente a unas 2 millones de personas. Alrededor del 70% de los potenciales trabajadores estadounidenses se someten a él. Es un negocio que crece a una tasa promedio del 15% anual y que moviliza unos 2 billones de dólares.
El origen
Una joven llamada Katharine Briggs llegó a la universidad a los 14 años y ocupó el número uno en su graduación. En su tiempo (1875-1968), una mujer era para la casa, para ser madre, así que ella estableció en su casa, lo que denominó un “laboratorio cósmico de entrenamiento de bebés”. De esa manera usaría la crianza de su hija Isabel para que se desarrollara como una mejor persona, sin dudas era una mujer de pensamiento audaz.
Estaba muy entusiasmada con Carl Jung, ese conocido psiquiatra suizo que consideraba que las personas se comportan según unos patrones que están muy bien definidos y que hacen que nosotros procesemos nuestras emociones de una determinada forma, con lo que terminamos relacionándonos con los demás en función de eso.
Carl Jung, recopiló parte de su trabajo en un libro titulado Tipos psicológicos y eso sirvió de base para que madre e hija crearan el MBTI.
Crearon un cuestionario con preguntas sencillas, relacionadas con la cotidianidad y partiendo de los 3 ejes de personalidad establecidos por Jung: Extroversión –introversión, sensorial – intuitivo y pensamiento – emocional y sumaron un nuevo eje, el calificador – perceptivo. Al combinar las categorías se obtienen 16 tipos de personalidad que son la base del test MBTI.
El libro de la profesora de Oxford, Merve Emre, “The personality brokers” cuenta la historia del nacimiento de los test de personalidad. Afirma que no tiene validez científica y que atiende más a intereses de la psicología industrial que a otra cosa.
Isabel Briggs, una de las creadoras del famoso test, decía que si una persona conocía bien su personalidad podía conseguir un mejor trabajo.
En Persona, el nuevo documental de HBO Max, que cuenta con el soporte de la profesora Merve Emre, se hace gran énfasis en el origen del más famoso instrumento de medición del mundo el MBTI y es usado para descalificarlo como válido. Considerando que las personas son sometidas a él sin que tengan idea de lo negativo que este pueda ser.
El instrumento se tilda de poco confiable, porque una persona puede hacer varios test y tener resultados diferentes en cada uno ¿Cómo se justifica ese hecho? The Myers-Briggs Company, revela que eso sucede porque las personas no prestan la debida atención al contestar y al no ser honestos al responder suceden estas cosas.
Tal vez por esa razón haya una industria detrás de estos tests. Hay muchos que se han dedicado en redes sociales como youtube o a través de talleres presenciales, a entrenar a personas sobre cómo responder estas pruebas para que puedan lograr sus objetivos, un trabajo, acceso a la universidad, entrar a una academia militar, entre otros.
La Fundación Myers Briggs ha dicho a BBC, que su instrumento fue usado durante las II Guerra Mundial, por la Oficina de Servicios Estratégicos de Estados Unidos, que ahora es la CIA.
Una importante cantidad de las mejores empresas en el mismo país los sigue usando. Y lo mismo sucede con universidades y otras empresas en el mundo ¿El hecho de que tanta gente use el MBTI lo hace confiable? ¿Por qué usar el indicador a pesar de no haber sido creado por psicólogos clínicos y no haber superado el rigor científico? ¿Es discriminatorio el instrumento o el uso que se le da?
En este escrito expreso algunas reflexiones sobre MBTI, el test más famoso en el mundo para establecer la personalidad y cómo es usado.
Inspirado en el artículo de The Guardian, titulado; Persona: el lado oscuro detrás de los test de personalidad, escrito por Lisa Wong.
Fuentes; theguardian.com, mediplus.com y BBC Mundo.